Australia ha sufrido la ola de calor más intensa de su historia contemporánea. Hasta el punto de que en los mapas de temperatura se han agregado dos escalas nuevas de 50ºC a 52ºC y de 52ºC a 54ºC.
La situación sinóptica que ha dado origen a la ola de calor, comenzó a fraguarse a finales del año pasado, en el suroeste de Australia entre los días 25 y 30 de diciembre del 2012, alcanzando el día 30 temperaturas muy altas. Posteriormente fue avanzando hacia el este hasta alcanzar Tasmania, extremándose las temperaturas hasta alcanzar valores históricos de más de 45ºC en muchos locales. (Boletín meteorológico australiano http://www.bom.gov.au/climate/current/statements/scs43a.pdf)
(Mapa de temperaturas Fuente: http://blog.rtve.es)
(Mapa sinóptico. Fuente: http://blog.rtve.es)
Además de tener temperaturas extremadamente elevadas (muestra de ello es el día 7 de enero del 2013 donde la temperatura media en Australia fue de 40,33ºC), esta ola de calor también se ha caracterizado, por su extensión espacial de estas.
Y es que esta ola de calor viene después de una primavera se ha caracterizado por ser muy húmeda y cálida de lo habitual en el continente australiano, favoreciendo un aumento de la superficie forestal. Con estas temperaturas tan altas acompañadas de vientos del oeste cálido y seco la vegetación ha perdido agua, secándose esta. Esto ha convertido a Australia en un campo de cultivo perfecto para los incendios, expandiéndose con gran rapidez, habiendo más de 100 focos que han arrasado alrededor de 400.000 hectáreas, arruinando cosechas, poblaciones enteras, matando ganado y bosques.
Los próximos días se prevé una bajada de las temperaturas por la presencia de vientos del sur más fríos y húmedos, aunque continuarán las altas temperaturas en el centro y en el norte de Australia.
Para la Comisión de Cambio Climático del Gobierno australiano, este evento es una muestra de los efectos del Cambio Climático. Según la comisión los máximos históricos de calor se han duplicado desde los años 60, por lo que prevé un aumento de los incendios en los próximos años. Esta Comisión que en los próximos 50 años las temperaturas aumenten entre dos y tres grados debido al efecto invernadero.
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